Ramón Mur: “Un buen médico debe tener entusiasmo por aprender y a su vez ser muy humano”

Dada Report entrevista a este doctor, que habla sobre los valores de su profesión

Por Claudia Mur, Andrés López, Irune Vela y Carla Monedero

Ramón Mur Garcés nació en Gistaín en 1971. Estudió la carrera de Medicina en Lérida. Se especializó en Medicina Familiar y Comunitaria en el Hospital Universitario Arnau de Vilanova. Además, es diplomado en Sanidad por la Universitat de Lleida, Máster en Gestión de Equipos y Servicios Sanitarios en Atención primaria por la Universidad de Barcelona, Diplomado en Gestión de la calidad en AP por la Fundación IDIAP Jordi Gol i Gurina y Máster en Medicina Tradicional por la Universidad de Zaragoza. Mur fue elegido presidente del Colegio Oficial de Médicos de Lleida en 2015, y revalidado en 2019. Paralelamente a su cargo como presidente, ejerce asistencia sanitaria en el EAP del Eixample.

Dada Report- ¿Cómo llegaste a presidente del Colegio de Médicos?

Doctor Mur- Llegar a ser presidente Colegio de Médicos no fue para mí nunca ningún objetivo, entré en la junta de médicos como vocal de residentes y desde ahí estoy conociendo la institución, su funcionamiento, sus objetivos… Llegó un momento en el cual quedaba vacante la plaza de presidente y optamos a esa candidatura. Lo hicimos porque pensábamos que podíamos aportar algún proyecto atractivo para la profesión.

DR- ¿En qué consiste tu trabajo como presidente?

DM- Los colegios de médicos tienen la función de organizar y regular la función médica y por otra parte dar servicios. El presidente representa a la profesión médica, no a los colegiados, así que debe velar para que los objetivos del Colegio de Médicos sean cumplidos. Hay ciertos programas que realmente son muy excepcionales por el valor de la profesión, como son el PAIME (Programa de Atención Integral del Médico Enfermo) o la Fundación para la Protección Social.

DR – ¿Siempre quisiste ser médico?

DM- Cuando llegó el momento de elegir la carrera, no era mi primera opción pero seguí las recomendaciones de mi padre y, aunque era mi tercera o cuarta recomendación, ha sido una decisión acertada, porque la profesión de médico hace fortalecer los valores humanos y en definitiva el trabajar de médico hace desarrollar en ti unos valores, unas sensibilidades que te ayudan a ser más feliz.

DR- ¿En qué te especializaste y por qué?

DM- Me especialicé en medicina familiar y comunitaria porque es una especialidad que permite desarrollar un servicio en el ámbito rural y mantener un especial contacto con la población, con las personas conocidas de nuestro entorno.

DR- ¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

DM- Lo que más me gusta de mi trabajo es lo que compartimos la mayoría de los médicos; la posibilidad de ayudar a los demás. Realmente cuando compartes, cuándo eres capaz de ayudar a los demás, te sientes muy reconfortado, mejor persona y más feliz.

DR- ¿Qué es lo que menos te gusta de ser médico?

DM- Actualmente lo que menos me gusta de ser médico es la progresiva burocratización y des- humanización del acto médico, cuando la relación médico-paciente se deteriora, hay pérdida de confianza y sobre todo la pérdida de respeto, aunque no es una cosa exclusiva de la condición médica, es donde más se puede notar la falta de respeto y de confianza que tienen algunos ciudadanos.

DR- ¿Qué valores crees que necesita un buen médico?

DM- Un buen médico debe tener entusiasmo por aprender, por estudiar y a su vez debe de ser muy humano para proporcionar humanidad, entender el sufrimiento, porque eso es parte del tratamiento comprendido de las personas. El médico no siempre puede curar, pero siempre debe acompañar y empatizar con el paciente.